La visita

 
 

Violinista recoleto


Con enorme sorpresa, la semana pasada, los porteños sufrieron la mas increible tormenta de todos los tiempos. Pero aún asi la noticia empalidecio ante la sucesion de eventos que ocupan a estas cronicas.

Adivino la anticipacion del lector, a quien por su inteligencia respeto, y a quien sin mas preambulos con temblorosa tecla, anuncio, que si, que es cierto.

No, no!, perdon si acaso en mi entusiasmo eleve demasiado las expectativas, pero no es que el misterio haya sido resuelto. Lo que ocurrio es que el violinista Recoleto, saliendo de su ostracismo y ante la importancia de los actuales eventos, sin ninguna explicacion plausible, expuso su presencia en esta ciudad bonaerense.


Que emocion inembargable! Que inspiradora su presencia! La tranquilidad de su comportamiento y el estoicismo de su actitud y caracter, una vez mas me llevan a una admiracion icontenible que me obligo a volcar en estas frases.

Pido la indulgencia del lector, ya que mi incapacidad literaria me impiden expresar en forma elevada, el respeto y admiracion, que en mi se han agotado hace años.

Perdonaran mi falta de habilidad linguista, pero es que hay tanto que respetar y admirar que humildemente asumo y me justifico, ya que no creo que ni el mas inspirado de los poetas, podria absorber y expresar la emocion que su presencia inspira.


Lo que si es seguro es que no se lo puede acusar de metiche. Una vez mas, esgrimiendo una discrecion a ultranza, decidio que su politica de no intervencion, habiendo probado ser la mas adecuada y que mejores resultados le ha dado a traves de todos estos años, debia ser la que en estas circunstancias algidas le permitirian una retirada rapida y, como siempre, poco honorable.


Habil maniobra de este fervoroso creyente de la politica de respeto por el libre albedrio y determinacion de los pueblos. Quien es uno para pretender influenciar o participar en decisiones que solo corresponde que las tome mi madre? Ah! Esta en la cama inmovil e imposibilitada de comunicacion incoherente. Mayor motivo aun! Le tomara mas tiempo, pero sigue siendo su derecho. Aca no hay medias tintas, su respeto es inconmovible e intransigente. Habia que ver su falta de emocion cuando Mi madre murmura inniteligibles frases. No se le movia un pelo aun ante la realizacion de como se habia perdido mas de quince años en los cuales Mi madre podia comunicarse perfectamente. Que capacidad de absorcion emocional! Que coraje, que valor! Ni que vengan degollando! No se le asoma ni una escueta lagrimita! No se equivoque, para quien no lo conoce, es casi como si no le importara!


De cualquier manera, su participacion no puede ser minimizada ya que en su poder de sintesis en tres dias resolvio todo. Ah! olvide informar al estimado publico lector, que el Recoleto solo asomo su trompa de un Jueves a un Sabado de este mes de Abril. En su habilidad elusiva, aparece dos meses despues del accidente de la mama, por solo tres dias.

Hay que entender y no ser tan simplicista, es que el clima Bonaerense de Enero le jode el cutis.

En esas escasas horas visito cuatro (o tres?) veces el hospital, asimilo la situacion, y sacando iluminadas conclusiones  que habian escapado completamente a las simples mentes de sus limitados hermanos, entrego una respuesta sintetica y sencilla.


Nunca olvidare el momento en que con generosidad inigualable, se dirigio a nuestro padre, quien en escasas semanas cumplira ochenta pirulos, y como quien a un lago arroja el guijarro que en sucesivas ondas multiplicara sus efectos con consecuencias impredecibles, emitio su inspiradora frase; "Que averiguaste de eso de A.L.P.I.?"


Pero esto no es moco de pavo. El analisis de ese discurso, que la historia juzgara a la par de gloriosos hombres de la historia, lo ubicara con un merecido espacio a la par de cualquiera que se anime. Sarmiento y su analogia de la pluma y la espada, San Martin y su discurso justificando la falta de entrega de sus famosas espuelas, Rolando Rivas y su reconocida contribucion a la historia popular con su inspirada frase “La calle esta dura”, empalidecen temblorosas ante la espontaneidad, frescura, y inspiracion del Recoleto, elevandolo ya a la categoria de los famosos pensadores de este siglo.


Es poco evidente, salvo para el lector educado en la escuela de pensamiento griego, como con escueta y aristotelica capacidad, su frase no provee en si ninguna respuesta, sino que incitando al pensamiento y capacidad de deduccion del otro, instiga a que alguien mas elabore y actue.

Hay que agregar que su metodologia de inspiracion del pensamiento ajeno, resume una enorme capacidad administrativa, consiguiendo una vez mas, como es su costumbre, que todos sus logros sean a traves de otros, jamas comprometiendose ni asumiendo el riesgo de tener que responder economicamente o con una participacion mas activa que atentarian contra un caracter y trayectoria, defendida estoicamente a traves de dos decadas.


Despues de casi dos decadas de desaparicion, como este escrito mas arriba intenta resumir, solo los simplistas de mente considerarian escueta o escasa su participacion en estos eventos. Con sus seis palabras logro en escasos segundos iniciar una cadena de eventos aun mas compleja que Hirohito y su empalidecida frase, “Ma’si disparen!”


Y aunque mi admiracion ya parezca adulacion, no pueden dejar de resonar en memoria los ecos de su voz impostada que nada envidiarian ni al mismisimo Parraviccini y que a la usanza de pensadores de fuste, retrotraen a mi memoria poetas del calibre de Oscar Casco. Que entrega! Que orgullo haber estado presente en ese momento historico! Como me gustaria que fuera mi hermano!


Mientras en ciudad lejana, la anchoita se filetea enloquecida de gozo y orgullo. Como Josefina esperando ansiosa a Napoleon no se baña ni se afeita y se anticipa aleteando freneticamente el regreso triunfante del violinista Recoleto, quien a la mejor usanza de un politico experimentado, aparecio breve, mostro el pico, y se retiro rapidamente dejando en el aire esperanza de promesas vanas no expresadas, que nunca cumplira.


Aquietada su hipocrita conciencia, no lo volveremos a ver hasta el proximo hospital, en donde desinteresado y sin interes, “preocupado por el bienestar” de alguien mas, aparecera y se ira exactamente como hoy. Sin conciencia ni consecuencia.


Buen viaje.

 

Disculpen... solo liberando presion.